«Yo soy el Camino, la Verdad y la Vida.
Nadie va al Padre sino por mí.»
Nadie va al Padre sino por mí.»
(Juan 14, 6)
Corazón, lo esencial. Lo medular, el punto que resume y concentra un tema. La raíz que permite entender las sucesivas derivadas y dimensiones que va formando el asunto del que tratamos.
Sagrado Corazón de Jesús, es decir, el punto nuclear de nuestra Fe; el centro radical del que mana nuestra salvación eterna; la singularidad esencial por la cual somos Hijos y no simples creaturas de Dios:
«Yo soy el Camino, la Verdad y la Vida.
Nadie va al Padre sino por mí.»
Nadie va al Padre sino por mí.»
(Juan 14, 6)
Porque por el Bautismo obtenemos la Gracia de ser Hijos de Dios, Gracia que se concreta cuando creemos con todo nuestro corazón, caído y entonces mortal, en Jesucristo Nuestro Señor. Dios. Y hombre. Creer implica a los frutos de la Fe, los supone y los precisa:
(Juan 14, 15)
No hay bajo el cielo otro nombre dado a los hombres.
Adoremos con toda nuestra mente, con todo nuestro corazón
Adoremos con toda nuestra mente, con todo nuestro corazón
y con toda nuestra alma, al Sagrado Corazón de Jesús:
«Yo soy el Camino, la Verdad y la Vida.
Nadie va al Padre sino por mí.»
6. Me maravillo de que abandonando al que os llamó por la gracia de Cristo, os paséis tan pronto a otro evangelio 7. - no que haya otro, sino que hay algunos que os perturban y quieren deformar el Evangelio de Cristo -. 8. Pero aun cuando nosotros mismos o un ángel del cielo os anunciara un evangelio distinto del que os hemos anunciado, ¡sea anatema! 9. Como lo tenemos dicho, también ahora lo repito: Si alguno os anuncia un evangelio distinto del que habéis recibido, ¡sea anatema!
Nadie va al Padre sino por mí.»
(Juan 14, 6)
(Gálatas 1, 6- 9)
6. Me maravillo de que abandonando al que os llamó por la gracia de Cristo, os paséis tan pronto a otro evangelio 7. - no que haya otro, sino que hay algunos que os perturban y quieren deformar el Evangelio de Cristo -. 8. Pero aun cuando nosotros mismos o un ángel del cielo os anunciara un evangelio distinto del que os hemos anunciado, ¡sea anatema! 9. Como lo tenemos dicho, también ahora lo repito: Si alguno os anuncia un evangelio distinto del que habéis recibido, ¡sea anatema!
Ruega por nosotros
ResponderEliminar¡Amén!
EliminarSaludos cordiales :)
Agarrémonos con fuerza a Cristo y no lo soltemos por nada para que nos lleve al Padre.Saludos
ResponderEliminarSoltar a Cristo implica la muerte, y no hablamos de la primera sino de la segunda muerte (la real). ¡Bendito sea Su Santo Nombre por siempre!
EliminarSaludos cordiales.
Describes de manera elegante lo que está sucediendo en el sector eclesiástico de la Iglesia católica. Sin embargo debemos contemplar la realidad silenciosa y por ello desconocida de tantos hermanos sacerdotes, obispos y cardenales que al presente son santos, aman a Cristo, se entregan y se gastan por amor a Él y a las ovejas a ellos encomendadas.
ResponderEliminarDecía un santo que por la entrega y santidad de unos pocos, el Señor logra bendecir, atraer, convertir y sanar, rescatar y redimir a muchos que andaban por malos caminos.
Lo creo firmemente, así que estemos bien unidos al Señor, a la Virgen, a todos los santos de Dios en el cielo, el purgatorio y la tierra, que somos la Fuerza vivificante del universo, por Virtud e nuestra Cabeza, Jesucristo, nuestro Amado y Redentor único.
Gracias, por permitirme enrollarme como una persiana en tu casita, jejejeje
Abrazos fraternos y bendiciones para tu familia
Puedes extenderte cuanto quieras, hermana. Las palabras centradas en Nuestro Señor, Su Santísima Madre y Madre nuestra, y en la Iglesia (que es Santa a pesar del poder temporal que la gobierna, siempre un poder contingente a diferencia del de Cristo, que es eterno), siempre son bienvenidas.
EliminarEntiendo lo que dices y además tienes razón. Ocurre, sin embargo, que a veces las noticias que nos llegan desde el cuarto de máquinas de la Barca de Pedro son tan oscuras e inquietantes que a uno le entran ganas de pillar el látigo. Pero claro, una cosa es la Santa Ira ejecutada por nuestro Señor y otra nuestra ira, que si la dejamos salir es más que probable que de santa tenga bien poco y sí en cambio un mucho de soberbia. Es decir, que llevas mucha razón en lo que dices.
Abrazos fraternos y bendiciones también para tu familia :)
Nadie va a Padre sino por Mí. Esta realidad es desconocida por tantos ecuménicos... Sagrado Corazón, Amante, Amante, Amante... Hagamos lo imposible por llevar a los pobres pecadores al Encuentro con tan amable Corazón amante.Abrazos fraternos.
ResponderEliminarMás debe repetirse esa afirmación de Nuestro Señor Jesucristo porque condensa el Evangelio entero, y sí, los ecuménicos post-conciliares parece que se han olviado de ella, y conforme se acelera la pendiente del Tiempo es más evidente. Abrazos fraternos.
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