miércoles, 2 de octubre de 2019

Sepulcros blanqueados.

Isaías 5: 20-21
20. ¡Ay de los que llaman al mal bien, y al bien mal; que dan oscuridad por luz, y luz por oscuridad; que dan amargo por dulce, y dulce por amargo!
21. ¡Ay de los sabios a sus propios ojos, y para sí mismos discretos!

6 comentarios:

  1. Eso es pecado imperdonable. Un beso

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    1. Confundir intencionadamente al prójimo, lo es. Imperdonable ya no: si hay espíritu de contrición y una sincera intención de no pecar más, Jesucristo perdona. Otra cosa son aquellos que se empeñan en la felonía. Saludos cordiales.

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  2. Que Dios en su infinita misericordia nos perdone si alguna vez hemos cometidos tales pecados.Saludos

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    1. Estoy de acuerdo. Cuando hacemos examen de conciencia nos sorprendemos de lo pequeños que somos; de lo débil de nuestra naturaleza caída. Dios perdona siempre a quienes quieren ser perdonados con un corazón sincero y contrito. Infinita es Su misericordia, y también lo es Su justicia hacia quienes se apartan consciente y voluntariamente de sus mandamientos. Saludos cordiales.

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  3. Imagino lo que le puede haber inspirado el mencionar los versículos de Isaías, y es que las Sagradas Escrituras, por ser Palabra de Dios, siempre son actuales, siempre se encuentra una aplicación a la propia vida ó a la de los demás.
    Recios tiempos por los que pasa la Iglesia de Cristo, en los que se nos da gato por liebre, y aún querrían que les aplaudiéramos...
    Saludos fraternos

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    1. Imaginas bien, Neila. Tras las acostumbradas "una de cal y otra de arena" todo parece listo para que la Iglesia católica pueda llamarse, sin problemas, luterana. Empieza este mes una encrucijada para la Iglesia que puede marcar el inicio de la gran apostasía a cara descubierta. Sólo Dios Nuestro Señor tiene los tiempos, a nosotros sólo nos queda tener los ojos bien abiertos a las señales que se vayan dando y a tener nuestra lámpara encendida, velando. Dios te bendiga. Saludos fraternos.

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